Reflexión del Evangelio
Celebramos hoy la fiesta del Cuerpo y Sangre de Cristo, que viene a ser como una versión del Jueves Santo. Jesús se sienta a la mesa en la Última Cena y da de comer y beber a sus discípulos: “Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo. El que come de este pan vivirá para siempre. El pan que daré es mi carne, y lo daré para la vida del mundo (Juan 6,51). Ahora, nosotros se lo agradecemos, adorándolo en la custodia durante la hora santa y visitándolo en el sagrario. Le pedimos que acompañe y bendiga nuestro caminar en familia, escuela, trabajo y en la sociedad. La Eucaristía es fuente de vida, porque el Señor se hace presente en el pan y el vino, para darnos la fuerza necesaria y poder enfrentar las dificultades que tenemos en el camino.
¿Para qué nos sirve este Sacramento de la Eucaristía? La respuesta es sencilla, para alimentarnos con Cristo, para acrecentar la vida de Dios en nosotros, recibida desde el bautismo, para fortalecernos en las dificultades y para tener unidad en la Trinidad. Al comulgar, se supone que somos renovados e impulsados a hacer el bien. Jesús vive en la Eucaristía: “Mi carne es verdadera comida y mi sangre es verdadera bebida. El que come mi carne y bebe mi sangre permanece en mí y yo en él” (Juan 6,55-56). Qué misterio tan grande y hermoso permanecer en Jesús, convertirnos, transformarnos en él, para beneficio de muchos en la sociedad, tan falta de amor y de paz. Lo cierto es que si no comemos de ese pan y no bebemos de esa sangre no tendremos vida. Así de simple. ©LPi
Notas de Misa
Ministerio de Musica - Aclamación Antes del Evangelio
Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo, dice el Señor; el que coma de este pan vivirá para siempre.
Introducción de Misa
Bienvenidos a nuestra celebración eucarística en esta Solemnidad del Cuerpo y la Sangre de Cristo.
Las intenciones de esta Misa son para todos en nuestra canasta de intenciones y por...
Nos ponemos de pie para nuestra procesión.
Oración Universal
A. Por la Iglesia, para que, aunque somos muchos, todos formemos un mismo cuerpo, tal como lo imaginó san Pablo, alimentados con el cuerpo y la sangre de Cristo, roguemos al Señor.
B. Por los líderes electos, para que sientan hambre de lograr una sociedad justa y eso los lleve a trabajar por la justicia de las mujeres, los hombres y los niños más vulnerables, a quienes representan, roguemos al Señor.
C. Por un cese a la violencia con armas de fuego en esta nación, roguemos al Señor.
D. Por todas las personas que luchan en los desiertos de la pobreza, la soledad o el vacío emocional, para que encuentren sustento y esperanza, roguemos al Señor.
Con el Padre Roberto y Padre Arturo
E. Por todas las intenciones que han quedado en el silencio de nuestro corazón y que ahora elevamos en oración. Roguemos al Señor.
Con El Padre Kamil
E. Por todas las intenciones que han quedado en el silencio de nuestro corazón y por (lea las intenciones de Misa que se encuentra al inició del cuaderno). Roguemos al Señor.
Avisos
1. El sorteo preliminar de la rifa de nuestra fiesta parroquial por el día del padre está cerca y será el ganador de un iPhone 14 al terminar la misa de 8:00 p.m. Los boletos adquiridos, tendrán la oportunidad de seguir participando en el sorteo final el día de la clausura de nuestra fiesta parroquial, pudiendo ser el ganador del premio mayor de $5,000 y muchos premios más. Cada boleto tiene un valor de $5.00 y los pueden adquirir al salir de Misa o en la oficina parroquial.
